Esta semana leí este libro escrito por Laia Soler; fue una sorpresa ya que, hace años tuve la oportunidad de leer otro de ella. Cuando lo compré, tuve la impresión que sería un libro exageradamente cursi y romántico (para mi gusto) basándome en la portada. Sin embargo, a lo largo del libro me encontré con una historia muy bonita y llena de datos interesantes de la cultura islandesa y de sus parajes impresionantes que solamente se aprecian en los países nórdicos: auroras boreales, lagunas termales, erupciones volcánicas, icebergs, geisers, el sol de media noche y otros.
Desde hace unas semanas me interesé por Islandia, cuando leí Viaje al centro de la Tierra de Julio Verne. Laia, de igual forma, nos muestra una historia llena de turismo (con fotos incluidas) en los lugares más increíbles de Islandia. Nos lleva a dar un recorrido a toda la isla junto con los personajes.
El libro inicia con Laura, la protagonista, en un aeropuerto, pensando a cuál de todos los vuelos que aparecen en la pantalla va a tomar. Gracias a una señal que ella considera la indicada, aborda el vuelo a Islandia. Desde ese momento, el libro me atrapó, siempre he querido hacer exactamente eso: ir al aeropuerto y tomar el primer vuelo que me lleve a un destino desconocido. Creo que la mayoría en alguna oportunidad hemos tenido el deseo de salir de la rutina y perdernos en un lugar maravilloso.
“Las casualidades me habían llevado hasta ahí y me horrorizaba pensar que agradecía en silencio todo lo que había sucedido en mi pasado, porque, sin ello, yo no estaría ahí.”
Sinópsis
Laura padece de una enfermedad que no le permite ver y apreciar los colores, todo lo ve en blanco y negro, pero eso no es lo único que hace de ella una chica diferente; oculta un secreto increíble. Durante su estadía en Reikiavik conoce a Orri, un chico islandés que le propone recorrer la isla en auto junto a él y un amigo. A lo largo del viaje, ella se da cuenta de que no es la única que guarda un secreto, sino que ellos también tienen uno que le afectará en los días posteriores.
Uno de los aspectos que me gustó del libro es la habilidad de la autora para mezclar los problemas cotidianos de la familia, noviazgo, amistad junto con la mitología islandesa. Sitúa al lector en medio de diversos parajes y ambientes increíbles y logra envolverte en una trama llena de secretos que se revelan paulatinamente.
A mi parecer, el tema principal del libro (a diferencia de cómo creía al inicio que sería 'el amor romántico') es la amistad. Es ese amor fraternal que se tiene a personas con las que compartes muchos momentos de tu vida y con las que no necesitas conocerlas tanto tiempo para considerarlas familia.
Si tienes la oportunidad de leerlo, disfrutarás de una historia sobre la amistad y el perdón. Tiene 356 páginas con fotos de los viajes de la autora, así que técnicamente, no es un libro tan largo. Además, es autoconclusivo, es decir que no necesitas leer otros libros que lo complementan como sagas, precuelas, secuelas, etc. Si tienes tu horario muy apretado (como en mi caso), es un libro ideal, ya que lo lees, te gusta, lo terminas y puedes continuar con otros libros u otras actividades. No te quedarás esperando a comprar otro libro o a que publiquen el segundo libro.
"El ayer es historia, el mañana es un misterio, el hoy es un regalo, por eso se llama presente". Eleanor Roosevelt
Al terminar de leer este libro pensé en esta frase y cómo se manifiesta a lo largo de la historia; cómo la vida esta llena de imprevistos que la hacen cada vez más interesante.
SOBRE LA AUTORA
Pily Castillo
Pily es una viajera empedernida a la que le fascina investigar datos curiosos sobre la historia universal y de los cambios linguisticos de los idiomas, así como de los lugares que visita.
Dato curioso: Uno de sus pasatiempos favoritos es armar rompecabezas de paisajes.
No podría imaginar una vida sin apreciar los colores, y visitar Islandia. No cabe duda que se enfocó en lo que si puede apreciar, tanta belleza según veo en algunas imágenes, me hace más interesante la historia, ya lo quiero leer.